El IVA es un impuesto de valor añadido
que grava las entregas de bienes y prestaciones de servicios efectuadas
por empresarios y profesionales. En la aplicación del impuesto se
pueden distinguir dos aspectos:
-A los adquirentes de las cuotas del IVA les corresponden una obligación de ingresarlas en el Tesoro.
-Por sus adquisiciones el comprador paga un IVA para despues vender ese producto con el mismo IVA.
Si el resultado es positivo debe ingresarse en el Tesoro. Si es negativo
y se declara trimestralmente, se puede optar por solicitar la
devolución o bien compensar el saldo negativo en las liquidaciones del ejercicio siguiente.
Si es negativo y se declara mensualmente, la devolución se efectuará mes a mes.